viernes, 9 de marzo de 2012

Miradas

Una mirada sin mirar, más no mira mirando.

Unos ojos llenos de emociones, incapaces de pestañear, porque se niegan a perder esa sensación de completa felicidad. 
Otros ojos, vacíos, pestañeando cada poco en busca de algo que sentir. Pestañeos y respiraciones aceleradas. Pero al final...nada.